domingo, 26 de junio de 2011

SERENO

Está en su cueva. No habla, es mudo o al menos pretende serlo.
Cierra los ojos al mundo, ruega no ser molestado.
No se sabe si esta abrigado, no se sabe si es aconsejado.
Esta en su cueva ahí sentado, no se sabe lo que ha pensado, solo desea soltarse de las manos.
Es su escondite sagrado, su lugar inmaculado. Donde se esconde de los seres humanos, donde no debe responder cuando es llamado, donde es inmune a los disparos aunque permanezca desarmado.
No necesita ayuda, El tiene las respuestas de todo lo que lo atormenta.
Está en su cueva y no espera que lo reprendan, solo que lo entiendan.
Solo Él sabe cuándo saldrá, y no hay nadie que lo deba esperar. Nada sacas con quererlo tocar, ya que es dueño de ese lugar y Solo El te puede invitar a pasar y decirte cual es la hora de jugar.
No lo tenía planeado, pero sabe que es necesario, así que no llames a su puerta a no ser que esto tu no entiendas.
No grites a su lado porque no serás escuchado, a no ser que seas su invitado, no te sientas honrado de estar en su cueva a su lado ya que no eres más que un ser inanimado que lo acompaña en su estado, pero tampoco te preocupes por ser menospreciado porque recuerda que es solo su cueva en la cual tú no eres prioritario.
No debemos esperar, si no que tan solo apreciar como sale glorioso de aquel lugar en el cual sereno quiere estar.

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